MEDITACIONES

MEDITACION DE ACEPTACION
Pero qué es lo que debo aceptar ahora mismo?
Cierra tus ojos. Respira, lenta y profundamente. (Tumbado o sentado).
Siente las sensaciones de tu cuerpo. Todo lo que ahora surge de la experiencia corporal, obsérvalo, con amabilidad.
Descubre cada rincón de tu cuerpo a través de la atención plena . Localiza las zonas más tensas y más invisibles de tu cuerpo. Lleva la conciencia hacia ellas, suavemente.
Respira, como si el aire, fuese la brisa fresca que aclara la mente, liberando tus pensamientos que se aferran con fuerza a tu conciencia.
Observa, a qué tipo de pensamientos te aferras con más deseo, a cuáles con mayor apego. Siente cómo detrás de los pensamientos, la conciencia pura, respira.
Lleva la conciencia hacia el corazón, permite que el centro de tu pecho se abra. Siente como la carga que traes, como una piedra en el corazón, se va liberando, ahora lentamente de su peso. Respira.
Percibe , como a medida que contactas con el corazón de la existencia, todo sufrimiento cede, abriendo la puerta, a la aceptación.
Respira. Contempla todo lo que aquí está viviendo, en este instante. Libera el pasado y no temas al futuro. Disfruta profundamente de este momento de plenitud, en que la conciencia pura y cristalina, te abre sus brazos.
Siente el refugio sereno y cálido de tu conciencia infinita. Permite vaciarte de todo temor, angustia o tristeza, de todo anhelo, frustración o enojo que te mantengan alejado de este instante.
Acepta todo a tu alrededor, amablemente, respirando y soltando tu propia libertad.
Contempla el silencio radiante a tu alrededor.
Disfruta, suelta, fluye, acepta.